¿Sufres dolores de estómago constantes, tienes eructos y regurgitación a menudo o tus digestiones son difíciles? Es posible que pudieras ser portador de la Helicobacter pylori, la peligrosa bacteria estomacal que tiene el 54% de la población.
¿Qué es la Helicobacter pylori?,
También conocida como la ‘bacteria del estómago’, se trata de un tipo de bacteria en forma de espiral que infecta el estómago. En muchas ocasiones pasa desapercibida porque no da síntomas, pero puede ser la cauda deinflamación crónica del revestimiento interior del estómago (gastritis) y en el duodeno en los seres humanos. Esta bacteria también se considera una causa común de úlceras. De hecho el 90% de las personas con úlceras están infectadas.,
Lo más preocupantes es que esta bacteria es el factor de riesgo conocido más fuerte para el cáncer gástrico, que es la segunda causa principal de muertes relacionadas con el cáncer en todo el mundo. De hecho, una vez que la Helicobacter pylori coloniza el ambiente gástrico, persiste durante toda la vida.
¿Cuáles son los principales síntomas y cómo se contagia?,
Dolor abdominal en el estómago, sobre todo una hora después de haber comido, así como dolor nocturno estomacal, eructos y regurgitación, náuseas y vómitos, digestiones difíciles, sensación de hambre constante y mal aliento pueden ser las pistas de que se está infectado.
La forma más común de contagio es a través de la transmisión fecal-oral y se le atribuye principalmente al contacto con el agua o alimentos contaminados. Sin embargo, no se descarta que haya otras formas de transmisión aún no conocidas.,
Por ello, la higiene personal es el primer paso para reducir la transmisión de humanos a humanos. Se están desarrollando vacunas para prevenir la infección, pero todavía están en fase de investigación y no están disponibles para uso humano.
¿Cómo se cura?
Las pruebas para confirmar la infección Helicobacter pylori pueden realizarse en sangre, heces o muestras de aliento. También se pueden confirmar con una biopsia. Una vez confirmado, se puede empezar un tratamiento con una combinación de antibióticos durante dos semanas.,
Además, es muy recomendable cambiar los hábitos menos saludables, como evitar el alcohol y el tabaco y tomar aspirina, ibuprofeno, naproxeno sólo con prescripción médica.